¿Que es una y trina?

Aunque podría ser un refresco o un jilguero, no, en esta ocasión me refiero a La Santísima Trinidad.

Todavía recuerdo cuando estudiaba religión en el colegio y el cura de turno nos explicaba el misterio de la Santísima Trinidad, Para mi el misterio era el por qué era considerado un misterio si parecía algo evidente.

En la imagen se ven representados Dios Padre, El Hijo Jesucristo en la cruz y El Espíritu Santo representado por la paloma blanca, se hallan rodeados por las míticas lenguas de fuego tan recurrentes en la mitología cristiana, y en el centro se aprecia el triángulo, símbolo de la trinidad con un círculo y una recta en su interior representando la unidad de los tres.

Tres entidades, por un lado el Hijo, quien vino al mundo para poder interactuar con el, de otro el Padre que era quien ordenaba a hijo lo que debía hacer en cada momento, y del otro el Espíritu Santo quien era el encargado de obrar milagros y velar por todos.

Está claro que la analogía corresponde a las tres partes fundamentales que tenemos todas las personas: El Cuerpo el cual está diseñado para interactuar con nuestro mundo externo, la Mente que es quien idea las órdenes que el cuerpo debe cumplir en cada momento, y el Espíritu (o alma como lo llama el cristianismo) que moldea los sentimientos y convicciones para ayudar y guiar al cerebro.

Son tres conceptos diferenciados los unos de los otros, pero al mismo tiempo no puede ser el uno sin el otro y juntos forman el uno, a la persona.

Incluso existen técnicas como el Zazen que lo que buscan es conseguir el equilibrio entre los tres aspectos a través del subconsciente mediante la meditación para hallar la unidad.

Si lo decían bien claro, he incluso mi propio profesor creo que lo entendía de este modo, pero trataba de vendernos la moto de que era un misterio para no ser tachado de hereje.

Luego está la historia de San Agustín de Hipona que dice más o menos:

“Un día paseaba por la playa mientras iba reflexionando sobre el misterio de la Santísima Trinidad. Trataba de comprender, con su mente analítica, cómo era posible que tres Personas diferentes (Padre, Hijo y Espíritu Santo) pudieran constituir un único Dios.
Estando en esas cavilaciones encontró a un niñito que había excavado un pequeño hoyo en la arena y trataba de llenarlo con agua del mar. El niñito corría hacia el mar y recogía un poquito de agua en una concha marina. Después regresaba corriendo a verter el líquido en el hueco, repitiendo esto una y otra vez. Aquello llamó la atención del santo, quien lleno de curiosidad le preguntó al niño sobre lo que hacía:
–Intento meter toda el agua del océano en este hoyo –le respondió el niñito.
–Pero eso es imposible –replicó el teólogo– ¿cómo piensas meter toda el agua del océano que es tan inmenso en un hoyo tan pequeñito?
– Al igual que tú, que pretendes comprender con tu mente finita el misterio de Dios que es infinito…
Y en ese instante el niño desapareció.”

Mi conclusión tras examinar el texto, (aparte de que el niño se burló del santo), es que el agujero podría estar interconectado con el océano de modo que el agujero si que contenía realmente el océano, es cierto que nuestra mente es finita, pero no creo que tanto…

Tal y como expuse en mi anterior publicación sobre el Espíritu, pienso que los espíritus de todos los seres vivos están interconectados en el vacío del universo, esta podría ser la explicación de cómo tres personas son una, como no, ¿si todos somos en realidad una sola cosa?

Esta teoría puede levantar ampollas, claro, a quién le gustaría pensar que su espíritu está relacionado con el de una ameba o un asesino en serie, a todos nos gusta pensar que somos únicos e independientes, pero, realmente lo somos…