En mi anterior publicación hablé sobre las líneas temporales infinitas, y si esto es así ¿qué sucede con el destino?
Pues que el destino es incierto, es posible que dadas las características de determinada persona haya más líneas en que realice determinadas acciones, o que alguien con precognición hubiera sentido que algo determinado pasaría en un futuro, pero al ser la naturaleza de las líneas infinitas ese futuro no tendría porque ser vivido, luego sería posible que la persona cumpla su destino o que no.
Por lo cual la precognición no es un poder nada infalible, aunque el hecho de que alguien diga o incluso piense que algo va a suceder puede predisponer a que el hecho suceda.
Incluso la precognición podría estar basada en el porcentaje de probabilidades de que algo suceda, aún en este caso jamás serán del 100% por lo que siempre habrá alguna línea de tiempo que no cumplira ese destino.
En multitud de culturas el destino es tejido por los dioses, en la mitología griega incluso estaba personificado por la diosa Moira y estaba más allá de los mismos Dioses, podría ser que si tomamos a toda la energía espiritual del universo y admitimos que puede estar interconectada entre las líneas temporales podría hacer que las líneas confluyeran en algún punto dándole a ese punto la etiqueta de destino inexorable, pero dada la naturaleza plural de ese espíritu único, me parece harto difícil que le diese por mover los hilos para que todas las líneas temporales confluyan en un solo punto.
Dado que la misma palabra en español significa un punto de finalización, este destino último podría ser el fin del tiempo, donde confluyen todas las líneas temporales en un mismo fin, pero dada la vastedad de líneas también me parece increíble que se puedan juntar todas en un mismo punto final que podría ser algo así como el Big Crunch (la Gran Implosión, el opuesto al Big Bang) que finalice el tiempo que conocemos y nos haga retornar al inicio cuando aún no existía el tiempo ni el espacio.
Normalmente en las historias en que un personaje debe cumplir un destino, este destino está basado en algo positivo, como por ejemplo Gobernarás tu pueblo hacia una nueva era de prosperidad o Derrotarás el mal con tus propias manos…
Por lo que suelen ser un refuerzo positivo para el personaje para que tome el mejor camino y de este modo haya más líneas temporales encaminadas a este destino que a otro.
El destino es incierto, pero aunque nos podemos llevar chascos siempre es mejor creer en un destino positivo, dado que así, aunque no se consiga, al menos has estado un tiempo pensando que vas a conseguir algo bueno.